EL PP SOLICITA UNA PROGRAMACI??N CULTURAL MÁS ACORDE A LA MAYORÍA DEL GUSTO CIUDADANO

Encarnación Naharro, en la sede provincial del PP.

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El Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Albacete, como ya hiciera a través de una moción que fue rechazada por el equipo de gobierno e IU, ha vuelto a solicitar que sea la Consejería de Educación de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, la que asuma el gasto de las Escuelas Infantiles, como es su competencia, aliviando al tiempo a las arcas municipales, ya que se trata de un importante desembolso anual.

     Una solicitud que ha expresado el concejal popular Fernando Carreño en el transcurso de una rueda de prensa donde ha realizado un amplio balance de las áreas de Educación y Cultura durante el último año.

     Otro de los aspectos educativos mal gestionados por el equipo de gobierno, ha dicho Carreño, es el relativo a la lamentable situación que presenta el Museo del Niño, para el que se reservaron las instalaciones del antiguo Colegio Público Primo de Rivera, del que se hizo un proyecto para su nueva instalación, y que al carecer de presupuesto para su ejecución por parte de la Junta de Comunidades, quedó temporalmente aplazado.

     Dado el lamentable estado de las instalaciones actuales en los bajos del Colegio Público Benjamín Palencia, el director del centro solicitó a la alcaldesa una ubicación transitoria, como el antigua cuartel de la Policía Nacional, o cualquier otra que considerasen oportunas. Petición a la que se unió el Grupo Popular del Ayuntamiento de Albacete, pero que fue rechazada.

     Así las cosas, ha comentado Carreño “la situación es totalmente insostenible para el Museo del Niño de Albacete, falto de presupuesto para su funcionamiento y con un deterioro continuo, lamentable y progresivo, que no entendemos desde el Partido Popular y que constituye una falta de sensibilidad”.

     Ante dicha situación el pasado 22 de enero el director del Museo solicitó la  baja en la Sociedad del Patrimonio Histórico Educativo (SPHE), de la que fue fundadora el Museo de Albacete, junto con el de Galicia, Huesca, Baleares y Madrid, y cuyo secretario es el director del museo de Albacete Juan Peralta, al no poder asumir la cuota de dicha asociación. “Una situación ciertamente penosa para la educación, la historia y la cultura de nuestra Comunidad y ciudad”, ha comentado el concejal popular.

     Respecto de las obras en los colegios públicos Fernando Carreño dijo que ha pesar de ser muy publicitadas han sido a todas luces insuficientes, especialmente en lo que se refiere a la accesibilidad. En concreto en el Colegio Villacerrada, contestada por la comunidad educativa y la asociación de vecinos del barrio, y en el C.P. Castilla la Mancha, donde después de dos años, continua sin resolverse, a lo que habría que sumar como anécdota el cartel instalado en el C.P. Feria/Isabel Bonal que correspondían al C.P. Carlos V, “pero el caso es poner carteles donde sea y dificultar el normal funcionamiento de los colegios tapando con los mismos sus ventanas”, comentó.

     Por último y en cuanto a los aspectos relativos a Cultura, Carreño se refirió al centro José Saramago, obra muy costosa y que dos años después de su inauguración aún sigue padeciendo problemas en la instalación del aire acondicionado.

     Respecto a la programación de la Universidad Popular, cuyas aulas se encuentran en dicho centro, el concejal popular solicitó la ampliación de la misma en temas relativos a informática y cocina puesto que existen instalaciones para ello; así como la programación de más cursos cortos que tienen una alta demanda.

     Fernando Carreño solicitó además un cambio en la programación de actividades dado  el  escaso  número  de  asistentes  a las  actualmente diseñadas y que parecen  “no sintonizan  con el gusto de gran parte de los ciudadanos de Albacete, a pesar de su elevado coste, en algunos casos, lo  que  no  justifica  la  rentabilidad  de este tipo de actuaciones”, indicó, al tiempo que reclamó el correspondiente informe sobre asistencia, demanda y efectividad de la mismas, pues parece que “suelen estar programadas para los amigos y poco más”.

     En resumen, dijo Carreño “gestionar mejor los recursos, gastar menos y buscar una programación cultural del gusto del mayor número posible de los ciudadanos, que al fin y al  cabo es para quien tiene que estar dedicada”, concluyó.