Navarro califica la situación en la Sanidad regional como “alarmante” y lamenta la dimisión de la jefa del Servicio de Salud Mental

Carmen Navarro, en la sede provincial del PP.

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La diputada nacional del PP, Carmen Navarro, ha denunciado la falta de capacidad de gestión del gobierno regional de García Page, en la medida que se han conocido por parte de los gerentes del Sescam las limitaciones de personal para cubrir bajas y sustituciones, así como las de compra de material sanitario en los centros de Salud y hospitalarios.

Navarro ha calificado la situación como “grave” como consecuencia de los recortes que está aplicando Page en la Sanidad de Castilla-La Mancha, que ha motivado, entre otras cosas, la dimisión de la jefa del Servicio de Salud Mental del Área de Albacete. “Yo lamento esta dimisión y nos preguntamos cómo se va a seguir atendiendo a los pacientes, ante los recortes en plantilla y las limitaciones que también hemos conocido para la compra de material de aquí a fin de año”.

La parlamentaria nacional se preguntó dónde está este dinero que debería estar contemplado en el Presupuesto de este año, y lamento que Page tenga dinero para “renovar la flota de coches, para incorporar a Geacam a allegados del Partido Socialista, para incrementar la partida de asesores, pero no para la Sanidad de Castilla-La Mancha”.

Carmen Navarro también ha denunciado el aumento de las listas de espera sanitarias y el bloqueo de las mismas, así como la paralización de las derivaciones a la Sanidad privada, quizás porque se ha agotado el Presupuesto. “Los pacientes quieren ser intervenidos, aunque sea en otra provincia, y no lo que está pasando en estos momentos, con una incapacidad manifiesta”.

Asimismo, Navarro ha criticado las recientes promesas de Page en el debate sobre el estado de la región, en el que volvió a anunciar un Hospital para Albacete, cuando están pendientes las obras del plan director del Hospital General, o nuevos centros de Salud para Villarrobledo cuando sigue cerrada una planta en el Hospital Comarcal, así como el cierre en Albacete capital de ocho centros de Salud los sábados por la mañana.

Por todo ello, la diputada nacional calificó la situación de “alarmante” y mostró su preocupación por la inestabilidad política que hace todavía más difícil aplicar medidas de gestión en la Sanidad de Castilla-La Mancha.